Por: Juan Jabbaz.P
José Tomás Labarthe Cardemil (1984- )
La Calabaza del Diablo
ISBN: 9789567117628
Páginas sin numeración
$5000
Un gesto rehace todo:
Jorge Teillier
En estos momentos todo se presta para que el fin del mundo Tierra parezca próximo, evidente e indiscutido. La Literatura, que es el reflejo (in)consiente de todos estos movimientos planetarios, también está herida, aunque no de muerte: envejece en la UTI de un hospital desconocido para la mayoría. Ahí se encuentra al cuidado de un séquito de escritores que la mantiene estable dentro de su maravilloso riesgo vital.
José Tomás Labarthe Cardemil, con su segundo libro, P (La Calabaza del Diablo, 2011), se ahínca también, con delicadeza lúdica y didáctica, en el tratamiento de sanación del planeta, de la Literatura. La utilización y recolección que realiza con las estratagemas dispuestas por aquellos médicos literarios (N. Parra, J.L. Martínez, C. Bertoni, J. Teillier, etc.) que viven para siempre en esa habitación imaginaria donde yace la esencia de la literatura, es notable.
Con la sencillez de un errante, el autor va acariciando diversas corrientes culturales para encuadrarse, a la vez, en muchas y ninguna. De esta manera viaja profesando la Palabra a través de los Pensamientos: Poemas que se podrían establecer, gracias a la fragmentación discursiva propuesta en el libro, bajo la anarquía del orden caótico. Sí, el mismo que existe cuando se está previo al origen de un nuevo mundo, verso, Dios, cosa o como se le quiera llamar.
P, la letra embarazada
Un nacimiento, un parto. Un artilugio que surge de las entrañas para instalarse en la mente: cápsula conservadora de lo que queda del Planeta. Un reflejo, un (des)orden poético (que se manifiesta a través del poegrama, artefacto, jingle, relato radial, dibujo de niño(a), fotografía, prosa,…) que no llega más que a confirmar la sensibilidad y capacidad de este poeta —que busca poder colaborar en esa silenciosa pieza de hospital que es el universo—, de crear poesía en todo lo que (se) sucede por la mente y de —en este caso— traspasarla a una hoja ilimitada, en la que abunda el aire y escasean los elementos restrictivos:
“en este libro, las páginas
mantienen entre sí
la misma relación genética
que los sueños”.
Me gusto lo de P, la letra embarazada.Muy buena reseña, a ver si cuando me suelte respiratorio leo este libro y todos los otros que tengo en lista de espera de esta pagina.<br />Saludos :)<br /><br /><br />Vale.
Que buena reseña.Así da gusto.<br />Solo extrañé una probadita de P.<br />Puede ser?