Buzones para la paz (2022)
Felipe Salas Aguilar (1982)
Editorial Cuarto Propio
ISBN 978-956-396-178-2
119 páginas
Este libro de Felipe Salas Aguilar —profesor de Artes Plásticas y activista por Palestina— se divide en tres secciones: Aviones de papel, Creación poética y Cuentos breves. Mientras la primera son transcripciones de su homónima sección radial del programa “Palestina por siempre” de Radio Universidad de Chile, las otras dos corresponden a un certamen literario difundido en tal programa y que se llamó Buzones para la paz, siendo este el origen del libro.
Los textos introductorios —Prólogo, Aviso inicial y La radio— presentan y orientan la lectura de este libro, caracterizado por lo multiforme que es. En este sentido, se destaca la creación y el arte ante la realidad que se vive en Palestina; se subraya la memoria creada mediante el cuadro impresionista que es este libro; y se recalca a la radio como medio de información y de compañía.
Mientras se lee este trabajo, se puede observar la formación docente y artística de Felipe Salas, lo cual está en su estatus de autor y de editor a la vez. En Aviones de papel se trabajan temas de mucha actualidad, mediante juicios subjetivos y recursos narrativos como las preguntas retóricas y las afirmaciones figurativas. Los veintiocho textos que la componen varían entre las patrimoniales ciudades de Belén, Jerusalén y Hebrón; los dolorosos asesinatos contra Iyad Hallaq, Ali Abu Alayya y Mutasem Atallah; y las destacadas mujeres Ahmed Tamimi, Rafeef Ziadah y Karime Abbud, por solo nombrar algunos ejemplos. En Creación poética, si bien hay distintos autores, existen características homogéneas entre los ocho poemas reunidos. Primero, los temas tienden a exponer casi en su totalidad la violencia del Estado de Israel en contra de la población palestina, destacándose la referencia a niñas, niños y adolescentes. Segundo, los poemas están escritos de manera prosaica, por lo que, se entiende fácilmente lo que cada verso quiere transmitir. En Cuentos breves, sus quince textos son heterogéneos en fondo y en forma. Hay algunos relacionados con la cultura palestina, como son la llave, la comida, los olivos y la bandera, a lo que se suman alegatos basados en hechos reales como las ejecuciones extrajudiciales y la cárcel política. En cuanto a la presentación, los cuentos son disimiles en sus párrafos y columnas, sobre todo, por estar acompañados de ilustraciones que modifican la uniformidad de la diagramación.
Vale destacar, que este trabajo está precedido por un voluntariado hecho por el autor en el Campamento de Refugiados de Dheisheh en Belén durante el año 2019. Este hecho es relevante para interpretar mejor el texto, ya que el mismo es consecuencia de su compromiso personal tras su experiencia en Palestina bajo la Ocupación Militar del Estado de Israel.
Esta obra tiene su centralidad en hacer activismo por la población y el territorio palestino, presentándose como un objeto variopinto por ser polifónico —dado que reúne a 19 autores— y por ser policromático —dado que incluye un total de veintidós ilustraciones—. El resultado es un exhorto al lector desde distintos lugares, pero siempre acompañado por un valor ético en la letra y estético en el dibujo. Además, es un acto gentil a la resistencia pacífica de la población palestina, porque —como se expone en la contratapa— a la Nakba se le ha enfrentado preservado la cultura con una actividad libre y creadora mediante el esfuerzo colectivo de Buzones para la paz.
